Es el resultado de un proceso de participación ciudadana impulsado por la Municipalidad, en el que actores claves de la comunidad, incluyendo vecinos, aportaron sugerencias para avanzar en la realización de la obra.

La labor se dividió en etapas. En la primera se relevaron necesidades, ideas e inquietudes de los vecinos y actores claves de la zona, tales como instituciones y organizaciones locales, respecto del espacio público. En la segunda, se presentó el diseño preliminar, tomando en cuenta la opinión de la comunidad, con el objetivo de ejecutar el proyecto posteriormente.

En esta tercera etapa se llevará a cabo la presentación del proyecto definitivo. El objetivo es democratizar e integrar a la comunidad en la transformación de un espacio que pertenece a todos los ciudadanos.

El coordinador de Estrategias Participativas y Fortalecimiento Territorial, Diego Neri Ribero, expresó: “Esta iniciativa es un claro ejemplo de cómo la participación temprana en las políticas públicas no solo promueve un mayor sentido de pertenencia, sino que también fortalece la organización comunitaria. El trabajo previo para llegar a este diseño, generó espacios donde muchos vecinos pudieron discutir las problemáticas de sus barrios, sus virtudes y así definir qué tipo de espacio se necesita”.

Por último, el funcionario destacó: “Creemos que haciendo parte a los vecinos en la toma de decisiones, se logran resultados más sostenibles y con mayor apropiación colectiva. En este caso, el enfoque colaborativo no solo mejora la funcionalidad y el uso del lugar, sino que también contribuye a generar un vínculo más sólido entre los ciudadanos y su entorno”.